La Academia Española de Nutrición y Dietética recomienda la retirada del mercado del juego infantil ‘Burger Boom’ por considerar que existe el riesgo de promover o influir en el desarrollo de trastornos de la conducta alimentaria (TCA), tales como anorexia, bulimia o trastorno del atracón.
Este juego es una de las últimas novedades que la popular marca Bizak ha lanzado este año y que en estas semanas más se puede ver en anuncios promocionales de cara a la campaña de Navidad, con una notable presencia en las pausas publicitarias de los canales de televisión infantiles.
‘Burger Boom’ se basa en una mecánica simple de competición entre dos dos participantes, compuesto por un pulsador en forma de hamburguesa con tubos, un juego de cartas con ilustraciones y globos de látex. Cada jugador debe colocarse un globo conectado a uno de los tubos bajo la camiseta. Por turnos se van cogiendo cartas y, según lo que indiquen, se va pulsando la hamburguesa, que poco a poco hincha la «barriga». Pierde el jugador al que le explota antes.
Las ilustraciones de las cartas hacen referencia a acciones del tipo comer en exceso o comida muy calórica, practicar ejercicio para quemar la comida, etc. En opinión de la Academia, en el juego “se penaliza comer, se premia compensar y fomenta la asociación estigmatizante entre comer ciertos alimentos y engordar, así como entre el peso y la salud”.
Según explica Xandra Romero, coordinadora del grupo de especialización en TCA de la Academia de Nutrición, el juego emite conceptos inadecuados en materia de alimentación, el cuerpo y la salud, banalizando sobre la obesidad, y su mayor gravedad reside en estar dirigido a un público muy infantil que aún tiene los hábitos alimentarios en construcción.
Desde la Academia Española de Nutrición y Dietética lanzan un llamamiento a los padres recomendado no comprar este producto a sus hijos y sugieren a la compañía la retirada del mismo. Además, invitan a la industria a evitar perpetuar este tipo de mensajes por el riesgo que presentan los estereotipos y conceptos erróneos en juguetes que parecen solo parecen divertidos y educativos.
Es importante educar los niños sobre la importancia de comer de todo en la cantidad adecuada, pero sin estigmatizar ningún plato como «comida prohibida». Aunque este juego pueda parecer «ofensivo» desde un punto de vista adulto, no deja de ser un juego para niños.
Como de preocupante es que un juego que debería ser divertido pueda tener un impacto negativo en la forma en que los niños ven la comida y su cuerpo. La idea de penalizar comer y asociar ciertos alimentos con cosas malas no suena nada bien. Es importante que los juguetes que se les ofrecen a los más pequeños fomenten hábitos saludables y una buena relación con la comida. No obstante, si este juego se ha llevado a cabo es porque no será tan perjudicial para los niños.
Me parece preocupante que un juego como Burger Boom pueda influir en los niños de forma negativa, al asociar comida con «engordar» y premiar la idea de hacer ejercicio solo para «compensar» lo que se come.
Es importante educar los niños sobre la importancia de comer de todo en la cantidad adecuada, pero sin estigmatizar ningún plato como «comida prohibida». Aunque este juego pueda parecer «ofensivo» desde un punto de vista adulto, no deja de ser un juego para niños.
Como de preocupante es que un juego que debería ser divertido pueda tener un impacto negativo en la forma en que los niños ven la comida y su cuerpo. La idea de penalizar comer y asociar ciertos alimentos con cosas malas no suena nada bien. Es importante que los juguetes que se les ofrecen a los más pequeños fomenten hábitos saludables y una buena relación con la comida. No obstante, si este juego se ha llevado a cabo es porque no será tan perjudicial para los niños.
Me parece preocupante que un juego como Burger Boom pueda influir en los niños de forma negativa, al asociar comida con «engordar» y premiar la idea de hacer ejercicio solo para «compensar» lo que se come.