Luis Planas participa hoy, en la ciudad belga de Genk, en el Consejo Informal de Ministros de Agricultura de la Unión Europea, donde ha expresado la oportunidad de fijar líneas de actuación para una autonomía estrategia más abierta en la producción de proteína vegetal y desarrollar un sector agroalimentario más competitivo.
Planas ha recordado que una de las prioridades de la Presidencia española del Consejo de la UE fue la de impulsar esta autonomía que reduzcan la dependencia externa de materias primas y de productos esenciales como los destinados a proveer las necesidades de proteína vegetal.
Para ello, ha sugerido distintas medidas como la de incrementar el grado de autoabastecimiento del conjunto de fuentes proteicas, a través del aumento de la producción comunitaria y la diversificación hacia otras fuentes de proteína para alimentación animal o la de priorizar la política comercial y la negociación de acuerdos con terceros países orientados al acceso a estos insumos.
Ha señalado la importancia de mejorar los rendimientos de los cultivos proteicos e incentivar el consumo de legumbres como alimento básico de una dieta saludable. Con este objetivo, ha pedido establecer apoyos específicos para desarrollar estos cultivos.
El ministro ha citado la innovación, inversión e investigación en mejora varietal como herramientas para avanzar en la diversificación de las proteínas y mejorar los rendimientos. Para el ministro, la mejora vegetal requiere de una “apuesta clara” por impulsar políticas comunitarias de investigación y desarrollo que propicien avances como las nuevas técnicas de edición genética, “un asunto que apoyamos ampliamente durante la Presidencia española del Consejo” ha remarcado.
Planas ha señalado que la nueva Política Agrícola Común (PAC) cuenta con diferentes herramientas para favorecer su desarrollo y ha citado algún ejemplo práctico llevado a cabo por el Gobierno de España como reforzar la ayuda asociada a los cultivos proteicos con 51,25 millones de euros en el periodo 2023/2027, un 18 % más frente al anterior.
El ministro ha señalado que en las últimas semanas se ha discutido sobre las respuestas que hay que dar a las necesidades de agricultores y ganaderos, “pero ahora hay que dar un salto y no hablar solo de rentabilidad y sostenibilidad, sino también de enfrentarnos a los retos del futuro, es decir, de cómo aumentar la producción vegetal para el consumo humano y la alimentación animal”.
Me parece muy acertada la propuesta de Luis Planas sobre la autonomía en la producción de proteína vegetal. Fomentar el autoabastecimiento y diversificar las fuentes de proteína no solo fortalecerá el sector agroalimentario, sino que también ayudará a reducir la dependencia de importaciones. Además, el impulso a la innovación y a la investigación en cultivos proteicos es clave para garantizar una alimentación sostenible y adaptada a las necesidades futuras. Es un enfoque que debería ser prioritario en la agenda europea.
Me gusta observar que cada vez más se esta inculcando nuevas formas de alimentación sostenible proponiendo productos innovadores que puedan ayudar, no solo a la alimentación saludable de las personas, sino al cuidado del medio ambiente. Además el apoyo de esta nueva política agrícola común no solo reduce la dependencia de materias primas externas, también incentiva la producción vegetal local y motiva tanto la creación como investigación de productos que puedan formar parte de esta solución. Creo que el planteamiento de este tipo de problemas motiva a tecnólogos de alimentos a superarse cada día más.