Cada pocos años surgen debates sobre los huevos. Parece que, tras años de desfavor debido a su alto contenido de colesterol, ahora los huevos están regresando al menú con renovada fuerza.
Durante casi 50 años, se pensaba que los huevos contribuían a elevar los niveles de colesterol en el plasma y aumentaban el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Basándose en esta creencia, las recomendaciones dietéticas incluían restricciones en su consumo. Sin embargo, medio siglo de investigaciones ha demostrado que el consumo de huevos y/o de colesterol en la dieta no está asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Se ha encontrado que en la mayoría de las personas el colesterol en los alimentos tiene un impacto menor en el nivel de colesterol total y en el colesterol LDL (considerado dañino) en la sangre que la combinación de grasas en la dieta. Especialmente considerando que los huevos suelen consumirse con otros productos ricos en sal, grasas saturadas y colesterol, como el tocino, el queso y la mantequilla.
Un gran estudio publicado en JAMA, en el que participaron 40,000 hombres y más de 80,000 mujeres, mostró que consumir un huevo al día no afecta significativamente el riesgo de enfermedad coronaria o accidente cerebrovascular en hombres y mujeres sanos.
Además, se ha demostrado que el consumo de huevos ayuda a mitigar una serie de deficiencias nutricionales y puede influir significativamente en el estado de salud general a lo largo de la vida. Según las últimas recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, una persona saludable puede consumir hasta 10 huevos por semana.
Cabe destacar que los huevos son principalmente una fuente valiosa de proteínas, vitaminas A, D, B12, B1, B2 y hierro, por lo que tienen su lugar merecido en una dieta equilibrada. ¿Qué más contiene un huevo? Aproximadamente 75 calorías, 5 gramos de grasa, 6 gramos de proteína, 0 carbohidratos, 67 miligramos de potasio, 70 miligramos de sodio y 210 miligramos de colesterol. Los huevos también son una excelente fuente de colina, un nutriente esencial en muchas etapas del metabolismo, y antioxidantes conocidos por proteger la vista.
Incluyendo huevos en nuestra dieta, debemos recordar las recomendaciones sobre su consumo.
“En el pasado, se temía que el consumo de huevos pudiera elevar los niveles de colesterol en sangre, aumentando el riesgo de enfermedades cardíacas. Sin embargo, los estudios de los últimos años han demostrado que era necesario revisar la percepción sobre el papel del huevo en la alimentación humana. El colesterol presente en los huevos, en la mayoría de los casos, no afecta los niveles de colesterol en sangre de la misma forma que las grasas saturadas, incluidas las grasas trans, que están tan presentes en los dulces y pasteles. La yema de huevo presenta una proporción muy favorable de ácidos grasos poliinsaturados en relación con el colesterol y una cantidad adecuada de fosfolípidos, por lo que consumir incluso 2-3 huevos al día no provoca un aumento del colesterol en adultos sanos. Los estudios actuales indican que el consumo de huevos, como parte de una dieta sana y equilibrada, no eleva significativamente los niveles de colesterol en la mayoría de las personas sanas, incluidos los niños. Considerando que pocos alimentos ofrecen una composición y un valor nutricional tan excepcionales, se recomienda que las personas sanas, incluyendo a niños y adolescentes, puedan consumir un huevo al día”, afirma la dietista Zofia Chwojnowska, autora en el sitio web del Centro Nacional de Educación Alimentaria.
Me alegra saber por esta noticia que para la mayoría de las personas consumir varios huevos al día es seguro y saludable. Sin embargo, creo que es importante tener en cuenta las necesidades individuales y el estado fisiológico de cada uno de nosotros. Como en el caso de cualquier otro alimento, y después de leer esta noticia, estoy convencida de que un consumo equilibrado implica incluirlos de manera adecuada dentro de una dieta variada, teniendo en cuenta sus beneficios nutricionales y sus características.