Inicio » alimentación y salud (Página 7)
Archivos de la categoría: alimentación y salud
Libros sobre alimentación y buen comer
La nutrición y el buen comer en la literatura ha evolucionado desde manuales básicos hasta estudios científicos exhaustivos y obras narrativas que nos conectan con la importancia del buen comer. Estos textos no solo nos enseñan qué alimentos elegir o cómo prepararlos, sino que también abordan las implicaciones culturales, económicas y emocionales de nuestra dieta.
Comer de otra manera
Alimentación intuitiva, de Elyse Resch y Evelyn Tribole, es un libro esencial en nutrición que propone reconectar con las señales internas de hambre y saciedad, dejando de lado las dietas restrictivas. Las autoras abordan temas como superar trastornos alimentarios y el estigma del peso, ofreciendo herramientas prácticas para integrar la alimentación intuitiva en la vida diaria.
Por su parte, Alimentación consciente, de Suzanne Powell, da indicaciones para tener una correcta combinación de alimentos y la elección de opciones libres de tóxicos. El libro incluye dietas desintoxicantes, monodietas de frutas y la relación entre los hábitos alimenticios y el bienestar emocional.
Tu alimento es tu medicina
Los principios modernos de nutrición no están peleados con la sabiduría ancestral del yoga, como se lee en La alimentación como medicina. En sus páginas, Dharma Singh Khalsa ofrece un enfoque integral para la salud física, mental y espiritual con un programa práctico basado en la desintoxicación, el uso de productos naturales y recetas nutritivas y una dieta rica en frutas, jugos y proteínas vegetales que no solo alimenta, sino revitaliza el cuerpo y la mente.
A la par, el Manual de alimentación sana, de Rafael Lezaeta Pérez-Cotapos, combina principios de la medicina natural con estrategias prácticas para una dieta equilibrada, destacando el impacto de los hábitos alimenticios en la salud integral. Siguiendo el legado de su padre, Manuel Lezaeta Acharán, el autor ofrece recomendaciones dietéticas adaptadas a diversas etapas de la vida y condiciones específicas como diabetes o problemas hepáticos.
Libros sobre alimentación y buen comer
Bar de Jugos, de Sara Lewis, es un libro práctico que ofrece más de 80 recetas de jugos y bebidas saludables para revitalizar el cuerpo y la mente. Destacando ingredientes naturales como frutas frescas y vegetales, el libro propone combinaciones nutritivas que promueven el bienestar.
Y siguiendo la línea de los alimentos en estado líquido, recomendamos Superfood Smoothies. Batidos de superalimentos, de Julie Morris, es un libro que ofrece 100 recetas de batidos energizantes y nutritivos, centrados en los beneficios de los superalimentos. Incluye un sistema de iconos que permite identificar las propiedades específicas de cada receta, como el contenido de proteínas o calorías.
https://librotea.com/estanterias/nutricion-y-buen-comer-en-la-literatura
Zaragoza forma a un centenar de personas en Las Fuentes para promover la alimentación sostenible y saludable en el barrio
Se trata de un programa piloto que se ha desarrollado para trabajar en red y facilitar que accedan a una alimentación más saludable todo tipo de colectivos.
En la iniciativa, que se enmarca en la Estrategia municipal de Alimentación Sostenible y Saludable, han participado usuarios de centros de mayores y de servicios sociales, adolescentes o inquilinos de viviendas sociales.
Cerca de un centenar de personas del barrio de Las Fuentes se han formado a lo largo de los últimos meses sobre cómo afecta la alimentación a nuestra salud, qué dietas son más adecuadas y cómo acceder a alimentos saludables y sostenibles. A partir de ahora ellas promoverán en el barrio, entre sus vecinos y conocidos, la importancia de adoptar dietas más saludables.
La creación de esta escuela de agentes de salud alimentaria es un proyecto piloto que ha desarrollado el Ayuntamiento de Zaragoza con financiación de la Fundación Daniel y Nina Carasso y la colaboración de CERAI y forma parte de las acciones de la Estrategia Municipal de Alimentación Sostenible y Saludable.
La consejera de Medio Ambiente y Movilidad, Tatiana Gaudes ha explicado que con esta iniciativa ‘buscamos mejorar la salud de todas las personas, especialmente de los grupos sociales más vulnerables económicamente. Los estudios científicos nos indican que estas personas suelen tener hábitos de vida, de alimentación y de actividad física menos saludables y eso repercute en problemas de sobrepeso, obesidad y enfermedades crónicas como diabetes tipo 2 o enfermedades cardiovasculares‘.
Las actividades de este programa piloto comenzaron el pasado mes de mayo y han concluido esta semana. A lo largo de estos meses se han desarrollado 26 talleres en los que se han formado unas 90 personas de diferentes grupos sociales. Se trata de jóvenes de 12 a 14 años de la ludoteca Cantalobos, usuarios del Centro Municipal de Servicios Sociales y del Centro de Mayores, miembros del grupo de Salud en Red de Las Fuentes y personas que viven en el edificio Ricardo Millán de Zaragoza Vivienda.
En estos talleres han recibido formación sobre qué es la alimentación saludable y sostenible y por qué es importante, qué enfermedades están relacionadas con una
alimentación poco adecuada y qué alimentos ayudan a tener una buena salud. Además se ha trabajado específicamente cómo acceder a una buena alimentación y cuánto cuesta, con visitas a los diferentes comercios del barrio. También se han realizado talleres prácticos para aprender a cocinar platos, almuerzos y postres saludables, sostenibles y económicos.
Gaudes ha destacado que el objetivo de esta escuela es ‘que ahora este centenar de personas actúe como agentes de salud alimentaria entre los colectivos a los que pertenecen y ayuden a otras personas del barrio en situación de vulnerabilidad para que puedan tener una alimentación más saludable y mejores hábitos de vida. Además, estarán contribuyendo a mitigar el cambio climático a través del consumo de alimentos sostenibles’.
La consejera ha puesto en valor que esta iniciativa ‘es fruto de la colaboración y el trabajo en red de diferentes servicios municipales, entidades y colectivos que ya venían desarrollando iniciativas de salud en Las Fuentes‘. Impulsada por la Oficina municipal de Medio Ambiente, Acción Climática y Salud Pública con la colaboración de los servicios sociales comunitarios del Ayuntamiento, el primer paso fue definir en qué barrio de la ciudad se iba a realizar y cómo ejecutarla.
La decisión fue implementarla en Las Fuentes y generar sinergias con otro proyecto que ya estaba en marcha en el barrio: Salud en red Las Fuente. Formado por entidades y profesionales del sector público y del tejido asociativo, trabaja para generar entornos saludables y mejorar la calidad de vida y el bienestar emocional de los vecinos como parte de la iniciativa Salud en Red en los Barrios, impulsada por Salud Pública del Gobierno de Aragón y Ayuntamiento de Zaragoza.
De esta forma, la mejora de la alimentación se ha integrado en ese trabajo como un elemento determinante de salud en el barrio.
Albergue municipal, escuelas infantiles y centros deportivos
Dentro de la Estrategia municipal de Alimentación Sostenible y Saludable, el Ayuntamiento de Zaragoza viene desarrollando también otras líneas de actuación. Así se ha trabajando con varios servicios municipales que realizan contrataciones alimentarias los criterios nutricionales, ambientales, sociales y educativos que pueden mejorar esas contrataciones. En este proceso, cofinanciado por la Fundación Daniel y Nina Carasso y con la colaboración de Mensa Cívica, han participado la Casa de Amparo, el Albergue Municipal, las Escuelas Infantiles Municipales, centros deportivos y los servicios de comida a domicilio.
Además, a lo largo de estos últimos meses, se han realizado diferentes acciones de sensibilización. Por un lado, se ha trabajado con las familias de las Escuelas Infantiles Municipales para que puedan completar en casa el menú saludable y sostenible que los menores reciben en la escuela.
Por otro, se han desarrollado acciones en las cafeterías de varios centros municipales deportivos, con degustaciones dinamizadas de alimentos saludables, como frutas y verduras de temporada y de cercanía. Estas iniciativas han ido dirigida por un lado a los adjudicatarios de las cafeterías, para conocer los costes de la materia prima, los márgenes comerciales y los posibles precios a los que se podría servir el producto, y por otro a los usuarios de los centros, para ver su respuesta a la oferta de ese tipo de platos.
Anisakis: qué pescados pueden tenerlo y cómo evitarlo
El anisakis es un parásito que se encuentra en el pescado de agua salada y puede causar problemas de salud como gastroenteritis y reacciones alérgicas graves. Hasta un 36% del pescado que se consume en España está contaminado con anisakis. Aunque el parásito muere al freír, asar o congelar el pescado, puede sobrevivir en otras preparaciones como el sushi, ceviche o boquerones en vinagre.
El anisakis es un pequeño gusano nematodo blanquecino que vive en el estómago de los animales marinos. Los gusanos liberan huevos en el mar, que son ingeridos por otros animales, y finalmente llegan al ser humano a través del consumo de pescado contaminado. Esto puede provocar una infección por larvas o una reacción alérgica.
La mayor prevalencia de anisakis se debe, en parte, a la práctica de eviscerar los peces en alta mar y arrojar sus vísceras al agua, lo que permite que otros peces se infecten al consumir esos restos. Además, la popularidad del sushi y otros platos de pescado crudo ha incrementado el número de personas alérgicas al parásito.
Síntomas del anisakis
El anisakis puede causar dos tipos principales de síntomas:
- Anisakiosis: Los síntomas aparecen entre 1 y 2 días después de consumir pescado contaminado. Incluyen dolor de estómago, vómitos, náuseas, diarrea, estreñimiento e incluso obstrucción intestinal en los casos más graves.
- Alergia por sensibilidad a las larvas: Puede comenzar minutos u horas después de la ingesta del pescado y provocar urticaria leve o, en los peores casos, un shock anafiláctico.
Diagnóstico y tratamiento
- Anisakiosis: Se diagnostica mediante una endoscopia digestiva alta, que también puede servir para eliminar las larvas. Además, se pueden usar aceites esenciales o medicamentos como el albendazol.
- Alergia al anisakis: Se diagnostica con pruebas serológicas o pruebas cutáneas. El tratamiento incluye antihistamínicos o corticosteroides. La mejor forma de prevenir una reacción alérgica es evitar el consumo de especies de pescado que puedan contener anisakis.
Peces que pueden tener anisakis
- Peces sin anisakis: Truchas, percas, carpas y otros peces de agua dulce.
- Riesgo bajo: Mariscos como ostras, almejas, mejillones y berberechos.
- Mayor riesgo: Merluza, besugo, boquerones, jureles, caballas, entre otros.
El riesgo de anisakis en peces de piscifactoría depende del tipo de granja. En piscifactorías de agua salada en tanques cerrados, el riesgo es prácticamente nulo. En estanques abiertos al mar, como en el caso de doradas o lubinas, aunque el riesgo sigue siendo bajo debido a la alimentación con piensos, no se puede garantizar la total ausencia del parásito.
Para evitar la contaminación cruzada, es esencial:
- Limpiar bien las vísceras del pescado, ya sea en la pescadería o al llegar a casa.
- Lavarse las manos antes y después de manipular el pescado y limpiar los utensilios utilizados, especialmente las tablas y tijeras.
Cómo matar el anisakis
Hay dos maneras para eliminar el parásito:
- Calor: Cocinar el pescado a 60 °C durante al menos 5 minutos mata las larvas.
- Congelación: Congelar el pescado a -20 °C durante 5 días es efectivo, especialmente si se va a consumir crudo o poco cocinado.
El 36% del pescado consumido en España está contaminado con anisakis, siendo más frecuente en el pescado proveniente del Cantábrico (50%) y más raro en el Mediterráneo (6%). España tiene la incidencia más alta de anisakiosis en Europa, con unos 8.000 casos al año, mientras que Japón lidera a nivel mundial debido a su alta ingesta de pescado crudo.
Legislación sobre el anisakis
Según la AESAN (Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición), es ilegal vender pescado con parásitos visibles en la Unión Europea. Además, los restaurantes y comedores deben garantizar que el pescado que no haya sido cocinado lo suficiente para matar el anisakis haya sido previamente congelado, e informar de ello a los consumidores.
https://www.elperiodico.com/es/sociedad/20241125/anisakis-pescado-tenerlo-evitarlo-111903888
Un profesor de alimentación revela cómo los tubos Pringles están especialmente diseñados para que volvamos por más, y todo se debe a la evolución
Un ex asesor dietético ha descubierto cómo un tubo de Pringles ha sido diseñado especialmente para hacernos volver por más, y dice que se debe a la evolución. En un nuevo documental de la BBC de dos partes, Irresistible: Por qué no podemos dejar de comer, el doctor Chris van Tooleken explora cómo los alimentos altamente procesados se vuelven psicológicamente adictivos.
Durante el primer episodio del documental de dos partes, Chris, médico de televisión y autor de Ultra Processed People, habla con expertos de la industria alimentaria de todo el mundo sobre cómo los alimentos ultraprocesados están diseñados para que sean casi imposibles de resistir.
Un ex empleado de la empresa de patatas fritas ha revelado cómo el famoso recipiente tubular está diseñado para animar a los trituradores de patatas fritas a comer más, evitando una parte evolutiva del cerebro. Así, el profesor Barry Smith, consultor en alimentación sensorial, reveló que los tubos están diseñados para ser demasiado pequeños para que nuestras manos imiten la sensación del forraje, de «buscar comida», de manera que aprovechar las experiencias sensoriales es una de las varias formas en que la industria alimentaria anima a las personas a comer más, comparten los expertos. Las texturas de los alimentos, los envases y la cultura de los ‘snackification’ contribuyen a nuestro apetito por los deliciosos alimentos ultraprocesados y a por qué es tan difícil dejar de comerlos. El resto del documental analiza los métodos mediante los cuales las empresas alimentarias hacen que los alimentos sepan mejor y, por tanto, más adictivos.
Médicos y autores han realizado una gran cantidad de investigaciones sobre este tipo de alimentos, analizando sus efectos en la salud física, mental y emocional de las personas, así como su potencial adictivo.
Caqui o Persimón: diferencias y beneficios nutricionales de estas frutas
El caqui es una de las frutas más típicas y esperadas del otoño; cuenta con grandes superficies de cultivo en España y una variedad con Denominación de Origen que ha dado lugar a una marca, el Persimón
El caqui o kaki, también conocido como palosanto o loto del Japón es un árbol originario de Asia. En España se cultiva en toda el área mediterránea, sobre todo en la Comunidad Valenciana -que cuenta con su propia Denominación de Origen-, aunque también está extendido y se da muy bien en la Región de Murcia y Andalucía.
Es una fruta con muchísimas propiedades. Entre ellas, una elevada concentración de vitamina C, al mismo nivel que los cítricos, según un informe publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Es hacia septiembre y octubre cuando la fruta del caqui empieza a cambiar del verde a las tonalidades rojas y anaranjadas que nos indican que ya están preparadas para que las arranquemos de las ramas antes de que se desprenda el fruto por sí solo y termine cayendo al suelo y echándose a perder. Los caquis maduran más o menos al mismo tiempo que los granados, dando a los campos en los que se cultivan un bonito color otoñal.
No todos los caquis que se cultivan son iguales. De la misma manera que en la mayoría de frutas, podemos encontrar distintas variedades como el caqui ‘gordo’, el ‘tomatero’ o el ‘picudo’: toyama, hatchiya y kostata, en sus nombres orientales. El ‘gordo’ es el menos apreciado para su consumo y el menos resistente al transporte y los ataques de las plagas, mientras que el ‘tomatero’ es más fuerte y sus frutos de los más ricos.
Además de las tradicionales, hay otra variedad más moderna, originaria de la Comunitat Valenciana, y con mucho éxito entre los amantes de esta fruta: es el Rojo Brillante, que con el paso del tiempo y varias investigaciones que han mejorado su textura y sabor han dado lugar al Persimón, más dulce pero más terso, no tan blando como el caqui.
Persimón se escribe con mayúscula porque es el nombre nombre comercial de una fruta ‘inventada’ en España, a partir de una variedad que nació en la Comunitat Valenciana y que se conocía primero como Rojo Gordo y luego, Rojo Brillante, con Denominación de Origen (DOP) Ribera del Xúquer.
En la página web de la DOP lo califican como un caqui “de gran calibre, con consistencia firme, piel y carne anaranjada, y con pulpa crujiente, similar a la de una manzana o un melocotón”. Y especifican que “no es una variedad de caqui, si no una marca registrada que identifica a los caquis de una DOP”. Aclaran, además, que no se trata de un transgénico.
La principal diferencia entre el Persimón y el caqui radica en que en el Persimón -tras las investigaciones del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA)– se consiguió eliminar la astringencia que presenta esta fruta y que provoca una sensación poco agradable al degustarla si no se toma en un proceso de maduración muy avanzado. De hecho, sobremadurado ¿Quién no se ha tomado un caqui partiéndolo por la mitad o abriendo un boquete y a golpe de cuchara?
Es decir, que para tomarlo sin pagar como peaje esa sensación rasposa en la lengua había que recolectarlo muy maduro. Quien tenga un árbol de caquis cerca lo sabrá bien. Pero al tener que recogerlos tan maduros, se dificultaba su recolección y transporte. Era muy complicado manipular las frutas tan blandas.
La astringencia del caqui se debe a su alto contenido en taninos -presentes en otros alimentos como el vino o el chocolate, los arándanos, el níspero o las uvas-, que provocan la coagulación de algunas proteínas; en este caso, la mucina que se encuentra en la mucosa bucal generando un gusto amargo y una sensación de sequedad. Y solo al sobremadurar esos taninos se convierten en insolubles y dejan de percibirse.
Para eliminar la astringencia en los Persimón se sigue un método: tras recolectarlo sin madurar tiene que conservarse entre dos y cuatro días a unos 20ºC en unas cámaras donde se crea una atmósfera concreta, carente de oxígeno. “Ya sea aplicando etanol (alcohol), o en cámaras donde se extrae el oxígeno y se introduce otro gas como el anhídrido carbónico”, explican desde la DOP.
Si tienes caquis todavía sin madurar y quieres probar el proceso en casa, puedes seguir un procedimiento más rudimentario pero efectivo: se trata de introducir las frutas en un recipiente que podamos cerrar como puede ser una cacerola amplia; en el centro del cazo colocaremos un vaso más o menos pequeño con algún tipo de bebida alcohólica fuerte -tipo coñac o cazalla- y dispondremos los caquis alrededor pero sin que estén en contacto directo con el alcohol. Vamos a dejarlos madurar unos días, entre cuatro y cinco, y pasado ese tiempo probaremos algunos de los caquis para comprobar si ya se ha eliminado la astringencia.
Finalmente, destacar que el caqui es una fruta con muchas propiedades, entre ellas su alto contenido en vitamina C. Pero no es la única, te enumeramos unas cuantas:
- Es una fruta con una elevada cantidad de pectina y mucílagos. Es decir, fibra soluble, muy beneficiosa para ayudarnos en el buen funcionamiento del tránsito intestinal.
- Tienen muchas vitaminas. Además de vitamina C, contienen provitamina A y betacaroteno, además de vitramina E, K y B6; lo que puede frenar los procesos degenerativos en los tejidos, y ayudar a que se mantengan fuertes huesos y dientes.
- Se recomienda en personas que tengan algún problema de la vista al contener zeaxantina.
- Entre los minerales presentes, cabe destacar la cantidad de potasio, magnesio, fósforo y cobre.
- Tiene un gran poder antioxidante, lo que neutraliza en parte los efectos de las enfermedades de tipo degenerativo y está indicada para personas con problemas de hipertensión o patologías cardiovasculares.
Fungicidas ilegales en UE son usados en plantaciones de aceite palma en Colombia, según informe
Alertan por la utilización de fungicidas retirados de la UE debido a su toxicidad.
Fungicidas y otros productos agroquímicos tóxicos, algunos prohibidos en la Unión Europea (UE), están siendo utilizados en plantaciones de aceite de palma de Colombia e Indonesia, según un informe presentado en Bangkok.
En un comunicado, el instituto de investigación holandés Profundo, coautor del informe, alertó por ejemplo de la utilización de fungicidas como kasugamycin y benomyl, retirados de la UE debido a su toxicidad, en plantaciones de aceite de palma en Colombia.
Profundo, que realizó el trabajo junto con el sindicato internacional de trabajadores del aceite de palma (IPOWU, en sus siglas en inglés), también destacó el uso en Indonesia de paraquat, un herbicida prohibido en la UE desde 2007 por estar asociado al riesgo de cáncer de tiroides y la enfermedad de Parkinson.
Este estudio sobre el riesgo de agroquímicos Colombia, Ghana e Indonesia fue realizado a través de entrevistas a unos 1.400 trabajadores en 32 plantaciones de aceite de palma de estos tres países. Los autores destacan 56 agroquímicos, incluidos tres calificados de muy peligrosos por la Organización Mundial de la Salud, en las tres naciones, principalmente en Indonesia y Colombia, mientras que en Ghana solo identificaron 7 de estos productos. Un 55 de los encuestados en Colombia dijo no haber experimentado problemas de salud, frente al 74% en Ghana y el 41% en Indonesia. En los tres países, los síntomas más comunes en las plantaciones fueron el dolor de cabeza (16%), mareos (12%) e irritaciones cutáneas (10%).
La experta indicó que las plantaciones «deberían tratar de no usar agroquímicos. Y cuando sea inevitable, deberían utilizar los agroquímicos que sean menos perjudiciales para la salud humana». Además, destacó la importancia de que los trabajadores de las plantaciones reciban formación para saber cómo usar los productos químicos sin riesgo.
Alimentos funcionales: ¿por qué son buenos para nuestra salud?
En los últimos años, el interés por los alimentos funcionales ha crecido, y no es casualidad. Estos alimentos, además de nutrir, aportan beneficios adicionales para nuestro organismo, mejorando nuestra calidad de vida. Pero ¿qué hace que estos alimentos sean tan especiales? A continuación, te lo contamos.
¿Qué es un alimento funcional?
Un alimento funcional es aquel que, más allá de sus propiedades básicas, aporta beneficios adicionales para la salud. Su consumo regular puede ayudar a prevenir enfermedades o a mejorar funciones del organismo.
En este tipo de alimentos, los componentes activos interactúan con el cuerpo de forma específica. Fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la digestión o reducir el colesterol son solo algunos de sus efectos positivos.
Beneficios de los alimentos funcionales para el organismo
Los beneficios de estos alimentos van más allá de la nutrición y apoyan diversas funciones del cuerpo. Aquí algunos de los más importantes:
- Fortalecen el sistema inmunológico: alimentos como el yogur aportan probióticos que protegen al organismo.
- Favorecen la salud digestiva: ricos en fibra y prebióticos, ayudan a equilibrar la flora intestinal.
- Reducen el colesterol: los ácidos grasos omega-3 presentes en el pescado son un gran aliado del corazón.
- Regulan el azúcar en sangre: alimentos con fibra soluble, como la avena, son ideales para personas con diabetes.
Estos alimentos se han vuelto esenciales para quienes desean cuidar su salud a largo plazo.
¿Qué tipos de alimentos funcionales existen? Ejemplos
Existen varios tipos de alimentos funcionales, cada uno con propiedades específicas. Algunos ejemplos incluyen:
- Alimentos enriquecidos: aquellos a los que se han añadido nutrientes esenciales, como la leche con vitamina D.
- Fuentes de omega-3: el pescado azul, como el salmón, es un ejemplo claro.
- Fibra alimentaria: presente en frutas y cereales, es esencial para el tránsito intestinal.
- Probióticos y prebióticos: presentes en alimentos fermentados, apoyan la salud digestiva.
Cada tipo ofrece un beneficio único para la salud, adaptándose a diferentes necesidades y preferencias alimentarias.
¿Qué son los probióticos? ¿Y los prebióticos?
Los probióticos son microorganismos vivos, como las bacterias Lactobacillus y Bifidobacterium, que apoyan la salud intestinal al equilibrar la microbiota. Estos se encuentran en alimentos fermentados como el yogur, el kéfir, el kimchi, el chucrut y la kombucha. Los probióticos son conocidos por mejorar la digestión y fortalecer el sistema inmunológico, ayudando a prevenir infecciones gastrointestinales y otros trastornos digestivos.
Por su parte, los prebióticos son fibras no digeribles que sirven de “alimento” para los probióticos, potenciando su acción beneficiosa. Ejemplos de prebióticos incluyen los fructooligosacáridos (FOS) y la inulina, presentes en alimentos como el ajo, la cebolla, el puerro, el plátano y la avena.
Al consumir prebióticos, estamos alimentando las bacterias buenas en el intestino, lo que contribuye a la salud digestiva y mejora la absorción de nutrientes. La combinación de prebióticos y probióticos permite crear un ecosistema intestinal equilibrado, esencial para un sistema digestivo saludable.
Los alimentos funcionales representan un avance significativo en el ámbito de la alimentación saludable, actuando como una herramienta clave para la prevención de enfermedades y el bienestar integral. Su incorporación a la dieta ofrece beneficios específicos para distintas funciones del organismo, promoviendo una vida más equilibrada y saludable.
Desde AINIA impulsamos la investigación y desarrollo de estos alimentos funcionales, aplicando tecnologías de vanguardia que permiten optimizar sus propiedades bioactivas. Nuestro equipo trabaja en la mejora de formulaciones y en el desarrollo de nuevas metodologías de análisis para evaluar la funcionalidad y seguridad de estos productos. Gracias a esta labor, ayudamos a las empresas del sector a ofrecer al mercado soluciones innovadoras y efectivas que responden a las crecientes demandas de los consumidores en términos de salud y calidad.
Investigadores del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos demuestran el papel del cacao en la optimización de la salud cerebral
Investigacion pionera inyta los efectos del cacao neurocognición
Investigadores del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos «José Mataix Verdú» (INYTA) han demostrado que las dietas enriquecidas con cacao rico en polifenoles-HPC («high-phenolic cocoa» mejoraron la memoria de reconocimiento de objetos, mientras que la memoria de reconocimiento de lugares y la navegación espacial no se vieron afectadas. La dieta HPC también aumentó la neurogénesis del hipocampo en adultos, impulsando la proliferación, la supervivencia y la cantidad de neuronas nacidas en adultos jóvenes. Sin embargo, ambas dietas enriquecidas con cacao aumentaron la inmovilidad en la prueba de natación forzada y la expresión de BDNF (factor neurotrófico derivado del cerebro) en el hipocampo. La electrofisiología del hipocampo no reveló alteraciones en la neuroplasticidad entre las dietas. Los resultados en su mayoría no se vieron afectados por el sexo. En general, la dieta HPC demostró un mayor potencial en cuanto a beneficios cognitivos y neuroplásticos, lo que sugiere un papel clave de los flavanoles del cacao en las intervenciones dietéticas destinadas a mejorar la salud del cerebro.
Cómo hay que pesar los alimentos, antes y después de la cocción
El pesaje de los alimentos en la cocina es un aspecto de vital importancia, ya que con ello nos aseguramos de que las recetas sean precisas y que la ración por cada comensal sea la adecuada. De igual manera, debemos tener en cuenta que existe una gran diferencia entre el volumen y la masa de los ingredientes antes y después de ser cocinados.
Para qué sirve pesar los alimentos
Este proceso de calcular la cantidad exacta que tiene un producto o ingrediente, independientemente de que esté cocinado o esté crudo, es fundamental debido a una serie de razones. En primer lugar, nos ayudan a que las recetas salgan a la perfección, ya que estaremos siendo precisos con las cantidades de cada uno de los ingredientes. Esta precisión es la que buscan muchos cocineros profesionales, ya que así aseguran la consistencia, la calidad y la regularidad de cada elaboración.
Por otro lado, si controlamos las porciones que consume cada comensal evitaremos consumir nutrientes de forma excesiva o incluso aquellos que tengamos que evitar como ocurren las dietas de adelgazamiento con las calorías. Ya sea por cualquier motivo, hay personas que requieren una ingesta de nutrientes más específica.
Cómo hay que pesar los alimentos
Son muchas las formas en las que podemos pesar nuestros alimentos, ya sea empleando una báscula o utilizando una serie de utensilios de cocina, en el caso de que no contemos con esta máquina.
Báscula de cocina
Son dos las básculas que podemos encontrar en el mercado: mecánica o digital. Estas últimas resultan algo más sencillas de usar y más precisas, ya que muestran en la pantalla digital el peso preciso de los alimentos. Las mecánicas por otro lado no necesitan batería ya que es una aguja la que nos marca el peso, razón por la cual son algo menos precisas.
Si queremos pesar un alimento en crudo, comenzaremos colocando la báscula en una superficie estable y plana. Para las personas que cuenten con una báscula digital, lo mejor es que nos aseguremos que se encuentra ajustada al cero una vez que la hayamos encendido para evitar pesajes erróneos.
En el caso de que los alimentos estén ya cocinados, mantendremos la báscula en una superficie estable y plana calibramos la báscula cero después de haber colocado el recipiente y será después cuando incorporemos el alimento.
Sin báscula de cocina
A pesar de que no va a tener la exactitud que una báscula de cocina, lo cierto es que podemos pesar
distintos ingredientes sin necesidad de disponer de una de estas.Para que puedas tener en mente distintas cantidades: una taza de harina son unos 120 g, una cucharadita de sal o azúcar son 5 g. y en el caso de los líquidos una taza estándar se corresponde con 250 ml. en el caso de las verduras y las frutas, calcular su peso es algo más sencillo si utilizamos proporciones: una taza de verduras picadas o una pieza mediana de fruta, se corresponde con una porción. Para alimentos como arroz o pasta siempre podemos emplear nuestras manos, teniendo en mente que una ración se corresponde con un puñado.
En cuanto a aquellos alimentos que ya han sido cocinados, es importante tener en mente que una porción de pescado de carne nunca debe sobrepasar el grosor de nuestro dedo meñique y la longitud de la palma de la mano.
Pesar antes o después de la cocción
El volumen y el peso de los alimentos se ve modificado como consecuencia del cocinado, ya que durante este proceso se puede producir una deshidratación o una absorción de agua por parte del ingrediente. Lo más recomendable en estos casos es que se pesen los ingredientes antes de comenzar a cocinarlos, debido a que los aportes nutricionales que vienen en el etiquetado, se basan en el producto en crudo. Este método es el mejor si pretendemos pesar arroz, carne o pasta, ya que su peso se ve increíblemente modificado durante la cocción.
En relación con aquellos que disminuyen de peso como el pescado , incluso verduras como los champiñones, el calabacín, las espinacas o la berenjena, es recomendable que los pesemos una vez que los hemos cocinado. de igual manera las cremas, guisos o sopas y platos que se preparan en proporciones más grandes, también debe pensarse después.
Pablo Ojeda, nutricionista: Esta fruta tiene el 40% de hierro que necesitas y te ayuda a dormir y a adelgazar
La fruta es uno de los alimentos base para una alimentación sana y equilibrada. Es verdad que giran muchos mitos en torno a la fruta, sobre todo a las que son dulces. Hay personas que son reacias a consumirlas durante el día, como postre o tentempié, porque no les van a ayudar a la pérdida de peso y otras no las consumen por la noche porque “engordan más”.
La realidad es que el consumo de fruta es necesario y recomendable a cualquier hora del día. Es más, consumir este tipo de productos, sanos, puede hacer que no comamos otros alimentos menos sanos y menos recomendables para la pérdida de peso o para nuestra salud en general.
Las propiedades del caqui
Dicho esto, es cierto que cada fruta tiene unas propiedades diferentes y que pueden ayudarnos más o menos en nuestros objetivos. En este sentido, Pablo Ojeda, nutricionista, habla de una fruta poco conocida y consumida en España pero que puede ayudarnos tanto para la pérdida de peso como para otros objetivos como el rendimiento deportivo y el descanso.
El caqui es muy dulce pero es “maravilloso y muy interesante porque tiene muchas propiedades para la salud”, explica el nutricionista. Entre otros beneficios “tiene un 40% de hierro que debes tomar al día, algo indispensable, por ejemplo, para las mujeres que están con la menstruación o para las personas que tienen anemia”.
Además, “tiene un aporte de magnesio y de potasio muy elevado por lo que también es una fruta muy interesante para los deportistas”, para recuperar tras los enfrentamientos y para rendir mejor, por tanto es una buena opción para incluirlo en la dieta tanto antes como después de los entrenamientos.
Pero, no sólo esto, sino que también es “muy rico en hidratos de carbono y fibra, por tanto va a aportar energía poco a poco y esto te va a ayudar a rendir más en el deporte durante más tiempo”.
Otra de las cualidades del caqui es que tiene potasio y magnesio, nutrientes que nos ayudan a descansar y a dormir mejor. Por tanto, el caqui es una fruta perfecta para tomarla “en la cena y que nos ayude a conciliar el sueño”.
Fruta muy dulce
A pesar de todos estos beneficios, muchas personas siguen siendo reacias a consumir este tipo de frutas porque creen que, al ser tan dulces, engordan más. ¿Qué hay de cierto en esto? Como apunta Ojeda, “una cosa es que sea dulce y otra que engorde”. En el caso del caqui, informa, “tiene un índice glucémico bajo, por lo que entra en sangre muy despacio.
Esto convierte al caqui en una fruta recomendable incluso para los diabéticos, pero también para la pérdida de peso”. Otras frutas que tienen un índice glucémico bajo son las uvas, las naranjas, las cerezas, los frutos rojos, las fresas, las moras o las frambuesas. Estas son frutas que “a pesar de que son muy dulces no engordan”. Es más, añade, “frutas como el caqui, que tienes que masticar, tragar y digerir, son perfectas para la pérdida de peso”.