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Libros sobre alimentación y buen comer
La nutrición y el buen comer en la literatura ha evolucionado desde manuales básicos hasta estudios científicos exhaustivos y obras narrativas que nos conectan con la importancia del buen comer. Estos textos no solo nos enseñan qué alimentos elegir o cómo prepararlos, sino que también abordan las implicaciones culturales, económicas y emocionales de nuestra dieta.
Comer de otra manera
Alimentación intuitiva, de Elyse Resch y Evelyn Tribole, es un libro esencial en nutrición que propone reconectar con las señales internas de hambre y saciedad, dejando de lado las dietas restrictivas. Las autoras abordan temas como superar trastornos alimentarios y el estigma del peso, ofreciendo herramientas prácticas para integrar la alimentación intuitiva en la vida diaria.
Por su parte, Alimentación consciente, de Suzanne Powell, da indicaciones para tener una correcta combinación de alimentos y la elección de opciones libres de tóxicos. El libro incluye dietas desintoxicantes, monodietas de frutas y la relación entre los hábitos alimenticios y el bienestar emocional.
Tu alimento es tu medicina
Los principios modernos de nutrición no están peleados con la sabiduría ancestral del yoga, como se lee en La alimentación como medicina. En sus páginas, Dharma Singh Khalsa ofrece un enfoque integral para la salud física, mental y espiritual con un programa práctico basado en la desintoxicación, el uso de productos naturales y recetas nutritivas y una dieta rica en frutas, jugos y proteínas vegetales que no solo alimenta, sino revitaliza el cuerpo y la mente.
A la par, el Manual de alimentación sana, de Rafael Lezaeta Pérez-Cotapos, combina principios de la medicina natural con estrategias prácticas para una dieta equilibrada, destacando el impacto de los hábitos alimenticios en la salud integral. Siguiendo el legado de su padre, Manuel Lezaeta Acharán, el autor ofrece recomendaciones dietéticas adaptadas a diversas etapas de la vida y condiciones específicas como diabetes o problemas hepáticos.
Libros sobre alimentación y buen comer
Bar de Jugos, de Sara Lewis, es un libro práctico que ofrece más de 80 recetas de jugos y bebidas saludables para revitalizar el cuerpo y la mente. Destacando ingredientes naturales como frutas frescas y vegetales, el libro propone combinaciones nutritivas que promueven el bienestar.
Y siguiendo la línea de los alimentos en estado líquido, recomendamos Superfood Smoothies. Batidos de superalimentos, de Julie Morris, es un libro que ofrece 100 recetas de batidos energizantes y nutritivos, centrados en los beneficios de los superalimentos. Incluye un sistema de iconos que permite identificar las propiedades específicas de cada receta, como el contenido de proteínas o calorías.
https://librotea.com/estanterias/nutricion-y-buen-comer-en-la-literatura
Taller de alimentos fermentados para pacientes con cáncer: “La comida que da la vida”
Una actividad organizada por Lanza Sueños que promueve el autocuidado a través de la alimentación saludable.
El pasado viernes, 22 de noviembre, la asociación LANZASUEÑOS organizó un exitoso y precursor taller de alimentos fermentados en el Centro de la juventud (Avd. Tierno Galván, s/n) de Herencia. El taller tuvo como objetivo fomentar el autocuidado en pacientes con cáncer y promover la importancia de la alimentación saludable a través de alimentos fermentados.
El taller fue conducido por el reconocido cocinero y chef Saúl Marcos Pola. La jornada taller se llevó a cabo con una primera parte de desarrollo teórico de conceptos básicos de alimentación fermentadas y su implicación en la salud, la inmunidad y el cáncer. Posteriormente se dio paso a la parte práctica de cocina y elaboración, implicando de esta forma a los asistentes a un proceso educativo en la responsabilidad de su salud y autocuidado.
Los asistentes aprendieron sobre cómo preparar los alimentos fermentados y conocer cómo pueden mejorar la microbiota intestinal y, a su vez, fortalecer el sistema inmunológico, mejorando la capacidad de respuesta del organismo ante el cáncer y ayudando en la prevención oncológica.
Estas jornadas apoyan al Plan de Sostenibilidad y cambio de modelo sanitario SESCAM, donde el Consejero de Sanidad refirió públicamente allá por el 2022 que: “Es fundamental optimizar el valor del gasto en medicamentos para lograr unos sistemas sanitarios eficientes y sostenibles”. Este objetivo puede apoyarse con una mezcla de instrumentos políticos que incluyan el fomento de la prescripción médica responsable y mejorar el compromiso de los pacientes.
LANZASUEÑOS agradece a todos los asistentes por su participación y se compromete a seguir organizando próximos eventos que promuevan la salud y el bienestar en la comunidad. Se está trabajando para que este taller sea el primero de muchos que contribuirán a mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer a través de la educación y la práctica de hábitos alimenticios saludables. Siendo el siguiente evento el 13 de diciembre donde se abordará la salud emocional.
El té que «lo cura todo»: tiene probióticos, aminoácidos y reduce el dolor en las ayuda a bajar de peso
Se trata de una bebida potente y sanadora proveniente de China. ¿Cuáles son sus propiedades y cómo prepararla?
Los alimentos probióticos, como el té de kombucha, se han convertido en una de las principales tendencias en la alimentación saludable. Gracias a sus beneficios para el sistema digestivo y su bajo aporte calórico, esta bebida fermentada ha ganado popularidad en todo el mundo.
La kombucha es una bebida fermentada de origen chino que se consume como té. Se prepara a partir de la fermentación del té negro o verde, azúcar y un cultivo conocido como Scoby (colonia simbiótica de bacterias y levaduras).
Este proceso produce una infusión con propiedades probióticas que benefician el sistema inmunológico y el aparato digestivo gracias a que se componen de microorganismos vivos que actúan como una barrera para las bacterias «malas».
En general, se encuentran de manera natural en alimentos, como el yogurt, elkimchi o la kombucha, una infusión ancestral que no es un «milagro nutricional», si no, que gracias a su aporte probiótico y bajo contenido calórico la convierten en una opción interesante dentro de una dieta equilibrada.
¿Cuáles son los beneficios del té de kombucha?
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), ha advertido que, si bien, esta bebida «no tiene gran interés nutricional, a excepción de su contenido en vitamina B y algunos aminoácidos«, su poder probiótico gracias a las bacterias y levaduras que contiene la kombucha, ayudan a reforzar el sistema inmunológico.
Sin embargo, es importante considerar que «estos beneficios se pueden quedar solo en agua coloreada con azúcar, sino se mantiene un proceso de producción responsable que garantice la correcta elaboración del té kombucha», advierten los expertos. Por ello, es recomendable adquirir el Scoby de fuentes confiables y mantener estrictas normas de higiene.
Rica en vitamina B y aminoácidos: estos nutrientes son esenciales para la producción de energía y la regeneración celular.
Fortalecimiento del sistema inmunológico: las bacterias y levaduras presentes refuerzan las defensas naturales del cuerpo.
Mejora del sistema digestivo: favorece la absorción de nutrientes y ayuda a combatir el estreñimiento.
Bajo contenido calórico: ideal para incluir en dietas saludables sin sumar calorías innecesarias.
Castellón Sano, jornada para promover la alimentación saludable
La concejalía de Consumo apuesta por la jornada «Castellón Sano» por una alimentación saludable.
La concejalía de Consumo y Casa Intur organizan el encuentro que se desarrollará de 10:30 horas a 14:00 horas del próximo sábado. Reunirá a expertos y profesionales del sector en un espacio de intercambio de ideas y buenas prácticas sobre la importancia de una alimentación sana, sostenible y de proximidad
La concejalía de Consumo, en colaboración con Casa Intur, empresa destacada en restauración colectiva para colegios, empresas y centros sociosanitarios, ha organizado la jornada ‘Castellón Sano’ para promover la alimentación saludable. El evento se llevará a cabo el próximo 23 de noviembre de 2024 en el Edificio Menador Espai Cultural de Castellón, ubicado en la plaza Huerto Sogueros.
El encuentro, que se desarrollará de 10:30 horas a 14:00 horas, reunirá a expertos y profesionales del sector en un espacio de intercambio de ideas y buenas prácticas sobre la importancia de una alimentación sana, sostenible y de proximidad. El objetivo principal es destacar el compromiso y la responsabilidad compartida entre los diferentes sectores en la promoción de hábitos alimentarios saludables y sostenibles.
La jornada contará con dos mesas redondas donde especialistas analizarán los retos y oportunidades de la alimentación actual y su proyección hacia el futuro. Además, los asistentes tendrán la posibilidad de compartir ideas y reflexionar sobre cómo garantizar el acceso a alimentos de calidad que beneficien tanto a las personas como al entorno.
Como parte de las actividades, Casa Intur ha preparado un espacio recreativo para los más pequeños, supervisado por profesionales educativos, con talleres y manualidades relacionadas con la alimentación. Esto facilitará la participación de familias en el evento. Además, el encuentro concluirá con un picoteo al aire libre, compuesto por recetas tradicionales de la zona, resaltando el valor de los productos locales y fomentando un ambiente de convivencia entre los asistentes.
Alberto Vidal, concejal de Comercio y Consumo, ha explicado que “con ‘Castellón Sano’ queremos visibilizar la importancia de la alimentación saludable como base para el bienestar personal”. En este sentido, ha explicado que “este evento refuerza nuestro compromiso con el consumo responsable, y esperamos contar con la presencia de numerosas familias para que puedan conocer de la mano de expertos algunas cuestiones clave sobre esta temática”.
Fuente: Castellón Sano, jornada para promover la alimentación saludable – vivecastellon.com
Día Mundial de la Alimentación: promoviendo una nutrición saludable y sostenible
Cada 16 de octubre, se celebra el Día Mundial de la Alimentación, una iniciativa global liderada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que busca sensibilizar a la población sobre la importancia de erradicar el hambre y promover una alimentación saludable y sostenible para todos. Este año, desde el Hospital Universitario La Luz, la Dra. Maria Luisa de Mingo, jefe deservicio de Endocrinología y Nutrición, quiere recordar la trascendencia de este día y compartir algunas recomendaciones prácticas que pueden ayudar a las personas a contribuir a esta causa.
«La alimentación saludable es sinónimo de bienestar y calidad de vida. La forma en que nos alimentamos no solo influye en nuestra salud, sino que también tiene un impacto en el medio ambiente y en la sociedad. En este Día Mundial de la Alimentación, reflexionemos sobre nuestros hábitos alimenticios y tomemos acciones concretas para mejorar nuestra salud y la del planeta», destaca la doctora.
¿Qué podemos hacer para colaborar?
- Comprar alimentos locales y de temporada: Al optar por frutas y verduras frescas de temporada, no solo estamos eligiendo productos más nutritivos, sino que también apoyamos a los productores locales. El consumo de legumbres, granos integrales y frutos secos es una excelente alternativa para fomentar una alimentación saludable y sostenible», añade la Dra. de Mingo. Además de ser nutritivos, estos alimentos necesitan menos agua para su producción, contribuyen a la fertilidad del suelo y reducen el impacto ambiental.
- Planificar la compra y evitar el desperdicio de alimentos: Organizar el menú semanal y hacer una lista de la compra ayuda a evitar la adquisición de productos innecesarios, lo que reduce el desperdicio. «Es fundamental comprar solo lo necesario y aprender a utilizar los alimentos de manera eficiente, ya que el desperdicio de comida es uno de los principales problemas a nivel global». También recomienda separar la materia orgánica y otros materiales compostables en sus contenedores correspondientes.
- Evitar productos envasados en plástico o cartón: Muchos de estos envases contienen disruptores endocrinos, sustancias que alteran el funcionamiento del sistema hormonal y se asocian con efectos adversos para la salud, como cáncer, obesidad y diabetes. La Dra. María Luisa de Mingo sugiere optar por envases de vidrio o comprar a granel cuando sea posible, para reducir el consumo de estos materiales y proteger la salud.
- Practicar la inocuidad alimentaria: La seguridad alimentaria comienza en nuestras propias cocinas. «Lavar bien las manos antes de manipular alimentos, mantener la carne y el pescado bien conservados y evitar que sus jugos entren en contacto con otros productos son algunas de las medidas básicas para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos», indica la doctora. Además, cocinar adecuadamente los alimentos ayuda a eliminar organismos dañinos y garantiza su inocuidad.
- Aprender a leer el etiquetado nutricional: Comprender el etiquetado de los alimentos permite hacer elecciones más saludables, prestando atención a las calorías, grasas, sal y azúcares. «Esto es especialmente relevante para reducir el consumo de productos ultra procesados que se asocian a un mayor riesgo de obesidad y enfermedades crónicas», puntualiza la especialista.
- Fomentar la educación alimentaria desde la infancia: Inculcar hábitos de alimentación saludable en los niños es la mejor manera de garantizar que se conviertan en adultos sanos. «La educación alimentaria debe comenzar en la familia y complementarse en la escuela, para que los niños comprendan la importancia de llevar una dieta equilibrada y respetuosa con el medio ambiente», destaca.
- Donar alimentos no perecederos: Una forma concreta de ayudar a quienes más lo necesitan es donar alimentos no perecederos a bancos de alimentos o iniciativas comunitarias. «Estos pequeños gestos solidarios pueden marcar una gran diferencia para muchas familias», afirma la Dra. de Mingo.
«Cada acción cuenta. Al elegir alimentos saludables, apoyar la producción local y reducir el desperdicio, estamos dando un paso hacia un futuro sin hambre y con mejor calidad de vida para todos», concluye la Dra. María Luisa de Mingo.
Día Mundial de la Alimentación: promoviendo una nutrición saludable y sostenible
Las 3 claves de la longevidad: deporte, alimentación y cuidado de la piel
Para Patricia Smith, una británica que recientemente celebró su centenario en un hogar de retiro en West Sussex, la clave de la longevidad reside en sus hábitos saludables, los cuales ha mantenido a lo largo de toda su vida. Desde la actividad física diaria hasta una rutina de cuidado personal sencilla, su ejemplo capturó la atención de médicos y científicos que buscan comprender los secretos detrás de una vejez saludable.
A lo largo de los años, diversos estudios demostraron que una combinación de actividad física regular, una dieta equilibrada, cuidado personal y lazos sociales pueden aumentar significativamente tanto la longevidad como la calidad de vida.
Según la Mayo Clinic, pequeños hábitos diarios, como una alimentación rica en frutas y verduras o realizar ejercicio físico, son fundamentales para envejecer con salud. Patricia Smith es un claro testimonio de ello.
Patricia Smith, quien nació en 1923, ha llevado una vida plena y activa desde temprana edad. A los 100 años, su apariencia juvenil y energía sorprenden a quienes la conocen, haciendo que muchos se pregunten cuál es su secreto para desafiar el paso del tiempo.
El deporte en la rutina de Patricia Smith
Uno de los pilares fundamentales en la vida de Patricia ha sido el deporte. Desde su participación en competencias juveniles hasta sus caminatas diarias en el hogar de retiro, ha mantenido una rutina activa a lo largo de los años.
Este hábito es respaldado por estudios científicos. Un artículo del British Journal of Sports Medicine señala que mantener una rutina física regular no solo mejora la salud cardiovascular y muscular, sino que también puede retrasar los signos del envejecimiento físico y cognitivo. Patricia es un claro ejemplo de cómo una vida activa puede prolongar tanto la longevidad como la calidad de vida.
La hidratación, el secreto de Patricia Smith para el cuidado de la piel
Ella ha sido constante en su cuidado de la piel, aunque de una manera muy simple. Ha evitado tratamientos cosméticos costosos, confiando únicamente en la hidratación diaria con cremas de día y de noche. Esta rutina le ha permitido mantener una piel libre de arrugas, algo que ha sorprendido a muchos, dada su edad.
Su enfoque está respaldado por investigaciones como la publicada en la revista Dermatology Research and Practice, que confirman que una piel bien hidratada mantiene su elasticidad y firmeza durante más tiempo, retrasando los signos visibles del envejecimiento. El uso de cremas hidratantes crea una barrera protectora que preserva la humedad de la piel, lo que puede ser uno de los secretos más sencillos, pero efectivos, para un envejecimiento saludable.
Una copa de vino tinto
El aspecto más curioso de la rutina diaria de Patricia es su hábito de disfrutar de una copa de vino tinto al día. A pesar de que el consumo de alcohol generalmente se desaconseja en exceso, algunos estudios como han demostrado que el consumo moderado de vino tinto puede tener beneficios para la salud cardiovascular, gracias a su contenido de resveratrol, un potente antioxidante que ayuda a combatir los radicales libres responsables del envejecimiento.
Para aquellos que buscan envejecer con salud, es importante tener claro que adoptar una rutina activa, cuidar de uno mismo constantemente, y disfrutar de los pequeños placeres de la vida.
Dieta vegana en niños: ¿qué hay que tener en cuenta?
Este tipo de alimentación requiere del uso de suplementos para resolver las carencias de no consumir ciertos nutrientes, lo que conlleva que se necesite de supervisión experta para seguirla. Bien planificada, es adecuada para cualquier etapa de la vida, incluida la infancia
Una dieta saludable debe incluir una variedad de alimentos que garantice que se cubren todas las necesidades nutricionales del niño – ELENA MEDOKS (GETTY IMAGES)
No comer carne ni lácteos ni huevos. Esta es la dieta que eligen algunas familias para su día a día. Padres y madres que quieren que sus hijos también sean veganos como ellos, ¿pero qué tienen que tener en cuenta? “El veganismo es más que un tipo de alimentación, es un estilo de vida. Por eso no es algo que se impone; es una conclusión de vida a la que llegan las personas y que conlleva querer dejar de consumir determinados alimentos por el componente ético y ambiental que supone”, explica la dietista y nutricionista Mapi Herrero.
Una dieta vegana bien planificada puede ser adecuada para niños, pero requiere atención especial a ciertos nutrientes:
- Proteínas: Es necesario combinar diferentes fuentes vegetales para obtener todos los aminoácidos esenciales. Lo podemos encontrar principalmente en los granos y cereales.
- Vitamina B12: Fundamental suplementarla, ya que no se encuentra naturalmente en alimentos vegetales.
- Hierro: Aunque presente en alimentos vegetales, su absorción es menor que en fuentes animales.
- Calcio: Debe obtenerse de fuentes vegetales o alimentos fortificados.
- Zinc: Presente en legumbres, frutos secos y cereales integrales.
- Omega-3: Importante para el desarrollo cerebral, se encuentra en algas, semillas de chía y nueces.
“Este tipo de dieta no tiene tanta tradición en España como en otros países, como la India, por lo que aquí muchas familias necesitan consejo y recomendaciones por parte de un profesional, y que así el menor cumpla con todos los requerimientos suficientes de calorías y proteínas” argumenta Redecillas.
Aunque este tipo de alimentación puede ofrecer beneficios como mayor consumo de fibra y antioxidantes, también conlleva riesgos si no se planifica adecuadamente. Algunas de las complicaciones que se pueden presentar, y la más probable, es el déficit de nutrientes esenciales para el crecimiento y riesgo de retraso en el desarrollo si no se cubren las necesidades energéticas y proteicas.
Debido a estas posibles situaciones, es recomiendable consultar con un pediatra o nutricionista para asegurar una dieta equilibrada, realizar controles periódicos para monitorear el crecimiento y desarrollo del niño y, sobre todo, considerar suplementos cuando sea necesario, especialmente de vitamina B12.
Qué hace un nutricionista infantil? | UNIR
Introducir una dieta nueva no es nada fácil, y más para los niños. Por ello, se exponen algunos consejos prácticos para vivir una transión saludable y segura.
- Introducir gradualmente nuevos alimentos y texturas.
- Ofrecer variedad de alimentos para garantizar una nutrición completa.
- Estar atentos a posibles signos de deficiencias nutricionales.
“La dieta puede estar más controlada y supervisada, pero puede ser igual de sana o insana que la que hace un niño que es omnívoro”, añade la médica. Para Redecillas lo más importante es que la alimentación sea equilibrada.
FUENTE: García, C., García, C., & García, C. (2024, 21 septiembre). Dieta vegana en niños: ¿qué hay que tener en cuenta? El País. https://elpais.com/mamas-papas/expertos/2024-09-21/dieta-vegana-en-ninos-que-hay-que-tener-en-cuenta.html
Dan Buettner, el experto en longevidad que investiga los secretos para vivir 100 años: “Me concentro en llevar una dieta basada en plantas”
‘Infobae España’ entrevista al mayor experto en zonas azules del mundo y a un joven local de estas regiones repletas de centenarios.
Poster de la miniserie «Live to 100: Secrets of the Blue Zones» disponibles en Netflix
Dan Buettner, un reconocido experto en longevidad, ha centrado su carrera en descubrir los secretos para vivir hasta 100 años o más. Su trabajo se ha popularizado a través del concepto de las «Zonas Azules», áreas geográficas donde las personas tienden a vivir más tiempo y con mejor salud que el promedio mundial. Estas zonas incluyen lugares como Okinawa en Japón, Cerdeña en Italia, Nicoya en Costa Rica, Icaria en Grecia y Loma Linda en California.
Buettner ha identificado que uno de los factores clave para la longevidad en estas regiones es una dieta predominantemente basada en plantas. Las personas que viven en las Zonas Azules consumen regularmente legumbres, granos enteros, verduras y frutas, mientras que la carne se consume con moderación. La dieta está enriquecida con alimentos locales, frescos y naturales, evitando los productos procesados, carnes rojas y azúcares añadidos.
Dan Buettner con un centenario de Nicoya (Costa Rica) comiendo los platos típicos (Netflix)
Además de la dieta, Buettner destaca otros hábitos de vida que contribuyen a la longevidad. El ejercicio físico regular es fundamental, pero no necesariamente en forma de rutinas intensas de gimnasio. En las Zonas Azules, la actividad física está integrada naturalmente en la vida diaria a través de caminatas, trabajos manuales y actividades al aire libre.
La conexión social también juega un papel crucial. Las personas longevas suelen tener fuertes lazos familiares y comunitarios, lo que les proporciona apoyo emocional y un sentido de pertenencia. Mantener relaciones significativas y participar activamente en la comunidad son aspectos que Buettner considera esenciales para una vida larga y saludable.
Dan Buettner con una centenaria en su documental de Netflix ‘Vivir 100 años: Los secretos de las zonas azules’
Otro factor importante es tener un propósito claro en la vida, algo que los habitantes de las Zonas Azules denominan «ikigai» en Japón o «plan de vida» en Costa Rica. Este sentido de propósito motiva a las personas a mantenerse activas y comprometidas con sus intereses y responsabilidades.
En resumen, Dan Buettner ha demostrado que la combinación de una dieta basada en plantas, actividad física regular, conexiones sociales sólidas y un propósito claro puede aumentar significativamente las posibilidades de vivir una vida larga y saludable. Su investigación ofrece valiosas lecciones para quienes buscan mejorar su calidad de vida y alcanzar una longevidad excepcional.
FUENTE: Osuna, C. A. (2024, 12 agosto). Dan Buettner, el experto en longevidad que investiga los secretos para vivir 100 años: “Me concentro en llevar una dieta basada en plantas”. Infobae. https://www.google.com/amp/s/www.infobae.com/espana/2024/08/12/dan-buettner-el-experto-en-longevidad-que-investiga-los-secretos-para-vivir-100-anos-me-concentro-en-llevar-una-dieta-basada-en-plantas/%3foutputType=amp-type
El aceite de palma es el «último demonio de la alimentación», pero no es el único
Gráfica 1: Contenido de grasas saturadas en productos de supermercado
Si mira en su despensa, no lo verá a primera vista, pero es muy probable que el aceite de palma esté ahí, en gran parte de los alimentos que almacena. Haga la prueba y revise la etiqueta de sus galletas, aperitivos, untables, chocolates, bollería, sopas instantáneas, pizzas o helados. El ingrediente, que a veces aparece camuflado bajo otras denominaciones, como aceite de palmiste, estearina de palma o incluso el nombre de la especie de la que procede, Elaeis guineensis, es el rey de los productos ultraprocesados, la grasa estrella para la industria alimentaria.
En las últimas semanas, está en boca de todos. La polémica sobre su uso ha alcanzado tales dimensiones que varias cadenas de supermercados han anunciado su intención de prescindir del aceite de palma en sus productos de marca blanca e incluso el Congreso de los Diputados ha aprobado una proposición no de ley que, entre otras disposiciones, insta al Gobierno a restringir el acceso a los productos con aceite de palma por parte de la población infantil. La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) también ha recordado en un comunicado que «se está trabajando con la industria alimentaria y otros agentes implicados en la reformulación o mejora de la composición de los alimentos», lo que incluye la sustitución de las grasas empleadas «por otras vegetales más saludables».
Pero, ¿qué efectos tiene sobre la salud?, ¿por qué se ha convertido en el último demonio de la alimentación?
En primer lugar, el aceite de palma es muy rico en grasas saturadas, por lo que «no es recomendable en un contexto de dieta saludable, ya que eleva el colesterol y puede favorecer la aterosclerosis y enfermedades cardiovasculares», señala la AECOSAN, que recuerda que las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aconsejan reducir la ingesta de estas grasas y limitar su consumo a menos del 10% de las calorías totales de la dieta (un máximo de 20-22 gramos de grasa saturada al día para un régimen aproximado de 2.000 kcal).
Al igual que la agencia, muchas voces, como la Asociación Española de Pediatría, se han manifestado en las últimas semanas asemejando el perfil de este aceite con el de otros productos ricos en grasas saturadas y señalando que al margen de la recomendación general de limitar el consumo de estas grasas «no existen datos específicos concluyentes sobre el consumo de aceite de palma, sobre todo cuando se estudia en el contexto de una dieta equilibrada».
Sin embargo, otros especialistas, como Aitor Sánchez, dietista-nutricionista, tecnólogo alimentario y divulgador científico, consideran que este argumento «supone una simplificación enorme porque hace tiempo que sabemos que no todas las grasas saturadas son iguales».
El perfil de estas grasas, explica, depende mucho de sus características. «Y resulta que el aceite de palma está compuesto principalmente por ácido palmítico, que se ha demostrado como uno de los menos saludables dentro de los saturados, tanto a nivel cardiovascular como en la relación que tiene con la aparición de diferentes patologías, como el cáncer».
Lo más preocupante, subraya, es que para su empleo en la industria, el aceite se somete a un proceso de refinado en el que se forman ciertas sustancias, como el glicidol, sus ésteres y los MCPD (monocloropropanodiol). Estas moléculas que aparecen al calentar la grasa a altas temperaturas (superiores a 200 grados) se han asociado con un mayor riesgo de problemas como el cáncer. La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha publicado recientemente un informe en el que precisamente advierte sobre la excesiva exposición de los consumidores ante estos compuestos, que no sólo se forman en el proceso de obtención de aceite de palma para uso industrial sino también, en mayor o menor medida, en otros aceites vegetales que se refinan.
Un uso rentable
Este refinado es fundamental para aportar al aceite algunas de sus propiedades más apreciadas por la industria, como su sabor neutro. «Además confiere una buena textura, permite que el producto se mantenga sólido a temperatura ambiente y se deshaga en la boca, le da estabilidad… También es muy barato, por lo que su uso es realmente rentable para las compañías», añade Miguel Ángel Martínez, catedrático de Medicina y Salud Pública de la Universidad de Navarra y uno de los principales investigadores sobre la dieta mediterránea en nuestro país, quien recuerda que un tercio del consumo mundial del aceite vegetal procede del aceite de palma pese a que su empleo masivo no sólo tiene consecuencias para la salud, sino también éticas y medioambientales.
Su método de producción ha sido muy criticado porque ha contribuido a deforestar hectáreas de selva tropical (se cultiva principalmente en países como Indonesia o Malasia, que han perdido gran parte de sus áreas boscosas) y se han denunciado en múltiples ocasiones las precarias condiciones laborales que tienen las personas que trabajan en su obtención, así como la expulsión de comunidades indígenas que se produce a medida que aumentan las zonas de explotación (se emplea también para la industria cosmética y la obtención de biodiésel).
Por todos estos motivos, no es la primera vez que el aceite de palma se pone en la picota pública. Sin embargo, hasta hace apenas tres años, su uso permanecía en gran medida velado para el gran público ya que la legislación permitía ocultar su empleo bajo la denominación genérica de «aceites vegetales». Desde que, en 2014, entró en vigor el Reglamento Europeo 1169/2011 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor, es obligatorio especificar el origen de la grasa que emplea un producto (no es lo mismo usar aceite de oliva, rico en ácidos grasos monoinsaturados, cuyas propiedades se han demostrado beneficiosas para la salud, que otras grasas), aunque no hay obligación de mencionar el porcentaje real empleado, algo que reclaman muchos especialistas. «En muchos se puede inferir evaluando la cantidad de grasas saturadas que tiene, pero debería detallarse», asegura Carlos Ríos, dietista-nutricionista y miembro del colectivo Dietética sin patrocinadores.
La información nutricional que aparece en el etiquetado es muy mejorable, coinciden en señalar los expertos consultados. «Ahora ha saltado la preocupación por el aceite de palma, pero hay situaciones más escandalosas, como por ejemplo que no sea obligatorio mencionar la presencia de ácidos grasos trans, cuyos efectos para la salud son mucho más perjudiciales», subraya Miguel Ángel Martínez.
No sólo es legal no detallar la presencia de este ingrediente en los productos -puede aparecer bajo la denominación de «grasas hidrogenadas o parcialmente hidrogenadas»-, sino que el porcentaje que se emplea puede integrarse dentro del porcentaje general de grasas saturadas declaradas pese a que sus efectos para la salud son mucho más nocivos.
En el año 2006, un metaanálisis publicado en la revista médica The New England Journal of Medicine demostró que un aumento del 2% de la energía diaria a través de la ingesta de ácidos grasos trans se relaciona con un incremento del 23% en el riesgo de desarrollar una enfermedad coronaria.
La evidencia científica contra las trans llevó a que algunos países, como Dinamarca, limitaran duramente su uso en la cadena alimentaria, aunque en la mayoría de las naciones no se ha elaborado una legislación al respecto de su uso, sino que la regulación se ha limitado a una serie de recomendaciones para reducir su empleo a menos de un 2% de la grasa total del producto.
Según explica el investigador, las trans -que se elaboran mediante un proceso de hidrogenación de aceites vegetales- nacieron precisamente para ocupar el lugar de grasas saturadas de origen animal en los productos procesados, después de que varios estudios asociaran su uso con un aumento del riesgo cardiovascular sin saber que su perfil era aún peor que el de sus predecesoras. Posteriormente, el uso del aceite de palma también se potenció como sustituto de las trans, aunque, nuevamente, no parece la alternativa óptima para la salud de los consumidores.
La polémica en torno al aceite de palma ha hecho que mucha gente haya empezado a buscar productos que en su composición no contengan este ingrediente, sustituyéndolos por otros que emplean otros tipos de grasa. Sin embargo, para los expertos en nutrición, esa «no es la solución del problema».
«Un ultraprocesado que no contenga aceite de palma no es por ello más saludable. Contendrá muy probablemente otras grasas de mala calidad, grandes cantidades de azúcares, sal y harinas refinadas, cuyo perfil nutricional tampoco es recomendable», apunta Miguel Ángel Lurueña, especialista en Tecnología de los Alimentos y consultor científico-tecnológico independiente para empresas alimentarias.
«Se está demonizando el aceite de palma, como también ha pasado con el azúcar, pero esa no es la cuestión principal. Hay que fijarse en el alimento en su conjunto. Y si lo que te preocupa es la salud, lo que tienes que hacer es dejar de comer comida ultraprocesada en general, no uno de sus componentes en concreto», añade.
«No comemos nutrientes, sino alimentos», subraya en la misma línea Carlos Ríos, que explica que es fundamental tener en cuenta la «matriz alimentaria», las interacciones entre todos los componentes de un producto y nuestro organismo. La «comida real», la que no pasa por un proceso largo de elaboración industrial, puede ser rica en componentes como los ácidos grasos saturados, pero, en su conjunto, también posee otros elementos beneficiosos que, compensan, al menos en parte, los perjuicios asociados a un determinado nutriente, explica.
Coinciden con su punto de vista Martínez y Sánchez: «La mejor garantía es apostar por los alimentos en los que no es necesario mirar la etiqueta, porque no la tienen. Hay que basar la dieta en alimentos frescos o mínimamente manipulados, en frutas, verduras, legumbres, carnes no procesadas, porque esos son saludables al 100%», remarcan.
«Muchas empresas han reaccionado a polémicas como la del aceite de palma retirando el componente en cuestión, pero reformulando los productos de forma que contengan ingredientes poco saludables, lo que en definitiva es una estrategia de márketing que no aporta nada», reflexiona Lurueña, que también critica que las autoridades reaccionen a golpe de polémicas y sólo pongan parches que no abordan el problema de la alimentación en su conjunto.
«La dieta de los españoles, a día de hoy, no es la mediterránea, sino la ultraprocesada y eso tiene una relación directa con el hecho de que las enfermedades crónicas no transmisibles, como las cardiovasculares y el cáncer sean las principales causas de mortalidad en nuestro país», coincide Ríos. «Si queremos que se reduzca el consumo de estos productos procesados insanos, ¿por qué no utilizar las mismas estrategias que se utilizaron en la lucha contra el tabaco y fueron efectivas?», expone.
No se trata de demonizar periódicamente un ingrediente, añade, sino que «la lógica y el sentido común nos dicen que deberíamos conjugar estrategias como los impuestos, campañas de concienciación y sensibilización, prohibición de publicidad, etiquetado del envase, etc. La industria está ejerciendo su poder, pero necesitamos urgentemente medidas políticas que regulen la situación y que aumenten la percepción del riesgo entre la población», concluye.
Fuente: https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/salud/2017/05/02/5907764046163fc6018b467b.html
La opinión de Harvard sobre el ayuno intermitente que no va a gustar a muchos
El ayuno intermitente es una de las prácticas dietéticas más extendidas en el mundo de la nutrición. Consiste en evitar comer o tomar algún alimento diferente al agua durante distintos periodos de tiempo. Esta práctica, que muchas personas han realizado, se ha sometido a estudio por parte de la prestigiosa universidad de Harvard. Y sí, la opinión de los expertos puede que te sorprenda e incluso te disguste.
El ayuno intermitente y los efectos en el organismo
En muchas ocasiones este tipo de práctica se realiza para limpiar el organismo o adelgazar. Estos dos objetivos son de las mayores motivaciones que existen dentro de la planificación dietética. Sin embargo, puede que estés perjudicando a tu organismo mediante este tipo de métodos.
No sólo implica que el cuerpo entra en un estado de cetosis, que hace que los niveles de glucosa bajen en exceso y se pierda una excelente fuente de energía del cerebro; sino que se ha demostrado mediante estudios del Journal of the American Heart Association que no guarda relación la restricción en la ingesta de comidas y adelgazar.Qué recomiendan desde HarvardEn Harvard han elaborado lo que denominan Plato Saludable. En él incluyen las recomendaciones para un consumo sano y saludable en términos generales. Este plato incluye:
- Aceites saludables (como oliva)
- Vegetales
- Agua e infusiones
- Granos integrales
- Frutas
- Proteinas saludables